El pasado jueves la Presidenta de la
Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, junto a la Alcaldesa de Ciudad
Real, inauguraban la ampliación del Museo del Quijote, 1.715 metros cuadrados
más, que albergará cuatro salas
expositivas, entre las que destaca de forma notable la incorporación de forma
permanente de elementos históricos del patrimonio ciudadrealeño; dos portadas
antiguas de casas de familias de rancio abolengo, bajorrelieves originales
realizados por Felipe García Coronado con escenas del Quijote para el monumento
a Cervantes, un escudo de piedra de la desaparecida muralla que sitúa la época
de Carlos V. El contenido de este espacio cultural se completa con una réplica
de la maquinaria interior de un molino de viento con piedra de moler antigua
original de un molino de consuegra y con la Biblioteca Cervantina que
alberga más de 3.000 ejemplares.
El
interior del Museo del Quijote incorpora la antigua puerta del Marqués de
Villater, que se encontraba en la calle Ruiz Morote
Detalle
del labrado dintel de la puerta del Marqués de Villater entre el estilo
plateresco por sus muchos adornos y decorado, casi de churriguera. La familia
ciudadrealeña Varona fue la que emparentó con el Marqués de Villater, de ahí la
llegada de este noble a nuestra ciudad
D.
Gaspar Sancho Varona y Loaissa Marques
de Villater, fue un personaje de la vida pública ciudadrealeña en el siglo
XVIII
Escudo
del Emperador Carlos V, más conocido como Carlos I, que perteneció a la
desaparecida Puerta de Alarcos de la muralla ciudarealeña y que durante muchos
años estuvo instalado junto a la Puerta de Toledo
Bajorrelieves
originales del monumento a Cervantes del escultor Felipe García Coronado, inaugurado
en 1927
Portada
de los Ibarrola que se encontraba en la calle Toledo en la actual Plaza de la
Constitución enfrente de la Diputación Provincial
Parece
ser que el escudo nobiliario pudo pertenecer a los Condes del Puño en Rostro o aun viejo linaje de Ciudad Real llamado de los
Porras
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